Así llaman mis nenes a las heroínas.
Y quien más superhéroa que la madre de uno. Pensamos que es invencible, de acero, e inmortal. Nada le puede pasar porque es ¨mi¨ mamá.
Mamá es incondicional, siempre esta, a velocidad del sonido resuelve y si estaba ocupada, usa su nariz de brujita , y en una contorsión temporal, llega a tiempo!
Nunca le duele nada, trepa, salta, corre, mueve, incansable, va y va.
Trabaja, cocina, ordena, limpia, corrige, ayuda, cuida, lleva, trae, juega, aplaude y estornuda todo al mismo tiempo con solo sus manos, piernas y actitud.
Su día es de 25 horas y mil horas extras sin pagar.
A veces me pregunto porqué no la vemos real? Si mamá no es inmortal, a mama hay que cuidar.
Y la primera que tiene que cuidarse es ella, es una, no perdiendo el lugar.
Mamà es numero uno y en ese lugar tiene que estar. Tal vez eso hay que lograr…
Felicidades a todas las mamás superheroas y de verdad.
12 de octubre de 2011
La superheroa
17 de octubre de 2010
Loca como tu madre!
Frase tan escuchada y familiar...
Pero debo reconocer que mi madre es una santa comparada conmigo, que emano locura por los poros.
Siempre me pregunto, cómo hacían, de dónde sacaban paciencia.O es que madres eran las de antes?
Mi cerebro no recuerda haber escuchado:¨no los aguanto más¨ o ¨me tienen re podrida¨, ¨me van a enloquecer¨, o ¨me voy a ir al carajo...¨
O será que la memoria ha borrado del rígido semejante bagaje de pasión desbordada?
Como sea, amnesia, supervivencia, la realidad es que las mamas de hoy tenemos la tolerancia o pacientómetro en menos diez. Y sin embargo, te quieren y sos lo más...Es raro.
Agradezco a mi madre su incondicionalidad y dedicación.
Perdones les pido a mis hijos, por ser demasiado real y no una diosa omnipotente como lo es mi mamá.
Imploro por cometer la menor cantidad de errores posibles y por encomendarlos hacia el bien.
Uy, me fui al pasto, ahora el ¨loca como tu madre¨ le toca a mi nena, que hasta ahora no me supera, pero el destino está librado...
Feliz día a todas!
11 de octubre de 2010
Mente que no duerme...
El cajón vacío.
Hay mujeres amantes de la literatura de autoayuda para etiquetarla con algún nombre, particularmente prefiero llamarla, los libros que te hacen crecer y evolucionar como mejor persona. Esos libros que te sacuden del letargo, o que te hacen funcionar como pila nueva o te parten la cabeza por la revelación descubierta.
Y aunque talvez no parezca un hallazgo, al tratar de quedar un minuto literal con la mente en blanco, la mente de la mujer es un caos de tránsito.
Un perfecto traffic ham, con puteadas, bocinazos, la radio a todo lo que da, algún choque en cadena, siempre está el recalentado al lado del camino, entre la polución del ambiente y la falta de movimiento, una termina estancada en medio de ese alto desorden.
Hace poco, una amiga me envió un video sobre el funcionamiento de los cerebros de los hombres y de las mujeres. El cerebro de la mujer era un enjambre de hilos interconectados, una maraña del bla, bla, bla 24 horas on line El del hombre era como una cajonera bien departamentada y para nada interconectada. La típica frase ¨no pueden hacer dos cosas juntas¨ es debido a estos cajoncitos que se abren de a uno por vez. Pero lo que más me llamó la atención, es que los hombres tenían un cajoncito donde no había nada. Sí, nada de nada. Empty, el cajón vacío, en blanco, o pintalo del color que más te guste… Pagaría por tener el cajón de la nada, sería el cajón violeta.
Porqué violeta? Porque el violeta es la trasmutación. Pero ahora que lo pienso mejor, si lo trasmuto, talvez se llene, y ya no sería el cajón de la nada vacía, sino de la nada llena. No serviría.
A esto me refiero, qué complicadas que somos. Seguro que eso de mente en blanco lo habrá inventado un hombre que con tal de que se lo entreguen rápido, no miró el muestrario de colores, y así quedo, básico. Si esa frase la hubiera inventado una mujer la mente sería aguamarina o un rosa pálido esfumado.
Pero imaginate poder en cualquier momento recurrir a ese cajoncito de paz, y cero pensamiento. Repito que pagaría por callar los diálogos eternos que nuestra mente tiene en su penthouse cerebral, o tener un botoncito de off.
En cambio cuando después de un agitado día, ya todos bañados, cenados y dormidos, te dignas a acostarte, miras un poco de tele, apagas la luz, y empieza el show. Mil vocecitas empiezan a recordarte todo lo que te faltó hacer. Mejor dormite que en tres horas arriba de nuevo. Pero el recordatorio continúa.
Y no solo lo que no hiciste hoy, como firmar el cuaderno de comunicaciones, sino que saltan deudas impagas desde hace años, y una pensaba que ya habían prescrito, pero no. Salen como voces fantasmagóricas que te reclaman el pago y en efectivo. Pero también las del abogado, las del fiscal, la del jurado, los testigos, y la cabeza a punto de colapsar. Después nos preocupamos por el aumento de los casos de ataques de pánicos o del consumo de clonazepan. Jaja, contate otra.
Cómo podemos vivir con el talk show de nuestras mentes, Con Cristina y Oprah incluídas!
Acaso nuestra mente tiene vida propia, y se quiere apoderar de nuestro cuerpo por más bagayo que sea?
Acaso nuestra mente quiere destruirnos y declararnos insanas, o todos los IN que se te ocurran? (no me refiero a los in y los out de la moda, lela)
Acaso no deberíamos darle batalla y luchar por tener nuestro cajón vacío?
Creo que sí, ohmmmm, ohmmmm, ohmmmmm
19 de septiembre de 2010
Sentido común
Semana del día del niño.
Que obra de teatro en el jardín, 7 pesos…
Que merienda especial. Mamá te tocó hacer sandwichitos. Qué suerte! Nunca llevar una coca…
Que busquen juguetes para regalar. Buenísimo, a desagotar, y que sepan valorar lo que uno tiene. Mamá los chiches deben estar en buen estado, limpitos, cositos y en su cajita… Lo que un principio era un ejemplo. Mamá terminó cosiendo, pasando cif, limpiando, pegando, y la puta madre!
Que este año, no se disfrazan como en los otros años. No, señor. Este año, desfile de maquillaje artístico…
Situación: mamá levantada desde las 6 de la mañana, buscando restos de make up de varios colores, como no se te cae una idea, googleas modelos a pseudo copiar, comprobás lo mala que sos pintando, dibujando, y encima a una personita que se mueve como si estuviera viajando en Bondi. Más tu parkinson… Pero quedate quieta. Ya te vas a ver…
Si me viera Dalí, Michelangelo, la de retos que me daría…
Listo. Quedó.
Quedó divino mamá! Bueh, es discutible gordita, digamos que es maquillaje vanguardista mi amor. Te autoconvencés.
Llegás al jardín. Y la de siempre. Mega producciones, hasta el pelo decorado tenían algunas. Pero tu lema es ¨ante todo humildad¨. Ja!
Qué lindo el jardín, cuanta creatividad, pero levantarse a las 6 a pintar..No da!!!!
8 de septiembre de 2010
Duda existencial educativa.
Una se la pasa bajando línea para que los hijos se comporten correctamente y no sean unos incivilizados power rangers.
La cantanela es histórica, pasará religiosamente de generación en generación, por los siglos de los siglos, olé!
Debés compartir y cuidar los juguetes y las galletitas comerlas todas ¿cúantos nenes desearían comer ese lado sin rellenar?
No pegar, morder o empujar. Rompe paga, pincha, o pierde
Ni arrancar media cabellera ni hacer burla ni pintarle la cara a los demás.
Escupidas, pisotones, mentiras, puteadas, y mil más.
Pero qué pasa cuando los peques vienen mordidos, heridos en sus sentimientos, o con un moretón nuevo?
La duda viene en determinar qué ley aplicar: ¨ojo por ojo¨, y empatar.
O poner la otra mejilla, y se la dan.
Cómo evitar decir, ¨devolvesela¨, ¨más fea será tu abuela¨, ¨y qué, tu mamá es una botinera más parecida a Zulma Lobato que a Wanda Nara¨ o entrenar al pequeño Karateca, cuan Daniel Sam, pulirrr y pintar y que aprenda a hacer la grulla , piña, patada, piña, patada.
Tampoco da que sea el buchón de la maestra, no hay nada más odioso que el buchonardi del jardín ni el puchinball.
A mis nenes les digo, ustedes acuérdense del semáforo o las tarjetas de infracciones en el futbol.
La primera vez que son golpeados, luz verde. Obvio que lloran, pero la dejan pasar. Aplica la ley de poner la otra mejilla.
La segunda agresión, es luz amarilla. Unas chipitas, pero que se la banquen, vale la amenaza verbal, face to face, respirandole cerca ¨a mi no me empujás, nunca más¨. Aplica la ley del Fair play, Warning, el que avisa no traiciona, ¨la próxima te escondo¨.
Y la tercera, luz o tarjeta roja, aplica ¨ ojo por ojo, te bajo los dientes¨.
Devoluciones al por mayor, se van los mandamientos al mismísimo carajo, y quedan habilitada las ocurrencias más groseras, piquete de ojo, implante capilar, amenaza del Cuco y del viejo de la bolsa, un tucumano bien dado. Plan de defensa y ataque.
A nadie le gusta ver a su hijo pegando, y menos golpeado.
El equilibrio del sensei.
26 de agosto de 2010
Juegos de hoy y siempre
En el jardín de mi nena, le asignaron tarea para realizar en el hogar.
La consigna era investigar a qué jugaban los niños en 1810, y luego caracterizados, los debían jugar y representar. Idea que me pareció muy interesante.
De la búsqueda de información, aparecieron las rondas, el Martín pescador, la payana, saltar a la soga, la rayuela, Ta-te-ti, Antón pirulero, las muñecas, bolitas, mancha, escondida, y cantaban Arroz con leche, La farolera y Mambrú entre otros, sí los mismos juegos que, antaño, jugaba y me divertía a lo grande.
Entre la nostalgia y la diferencia de la vida actual, hizo que me replantee algunas actividades de mis hijos, como ser limitar el uso de la tele, volver a jugar al aire libre, a la pelota, a crear juguetes de un objeto común y corriente, explicarles cómo se jugaba al gallito ciego o pegarle y pinchar la piñata. Controlar el uso de videojuegos o de la compu, si están condenados a su uso en el futuro ¿para qué quemar pasos, habiendo otros tantos entretenimientos para practicar?
En fin, activó en mí, proponerme volver a la fuente, la importancia de que los chicos generen vínculos con otras personas y desarrollen la creatividad.¿qué mas lindo que aprender jugando?
23 de agosto de 2010
Dos dedos de frente, aunque sea uno!
Mirando los blogs que sigo, y los que descubro, pienso cuánto talento en la red.
Cosa que no me pasa con la poquísima tele que veo, a la noche, algún programa de recopilados de lo que pasa durante el día, y suficiente. Sí con menos de una hora me empacho y me da ganas de vomitar.
Cómo se entiende que gente con cero habilidad, gracia, mensaje, o lo que sea, aparezca en la tele como si nada, y se haga famosa. Ejemplos sobran, desde el mamarracho de Zulma Lobato que recién leí en una revista que la convocó Tinelli para bailar, su canción y deseo hecho realidad. Con los actores sin trabajo que hay, lleno de capacidades que despiertan mas que aplausos, ver a eso brillando….
Que una editorial le haya publicado un libro a Belén Franchese ¿?. Acá tengo que poner un alto, porque con solo navegar un poco por la blogósfera, abunda y rebalsa el talento por doquier, la cantidad de proyectos que rechazan sin leerlos, tanto material donde el ingenio hace gala, y sin más, Belén tiene su libro…
Un hombre, luego de un accidente, dice dos frases, suficiente para lo conviertan en ringtones y empiece a facturar con sms o con actos de presencia?????
Mi cabeza estalla ante tanta mediocridad, cómo vamos a evolucionar, cómo vamos a mejorar con tanto sin sentido?
Qué pasa, la aptitud, la capacidad, el talento, la sagacidad, están demodé? Están out?
Tal vez la boluda sea yo, que me hago la inteligente, porque sino no se entiende.
Tal vez sea así… Pero así estamos…
16 de agosto de 2010
Los años no vienen solos…
Mil veces escuché esta frase, pero hace un tiempo que la padezco.
Situación: día de invierno fresco pero soleado. Mamá copada, jugando con los chicos a la escondida. Que pica por acá, que pica por allá.
Bueno, basta que mamá está cansada.
Una máss, una más.
Ok, mucho no se resistió. Mamá tiene la brillante idea de esconderse detrás de su auto, estacionado cerca del garage.
1, 2, 3. el que no se escondió se embroma. Ay vooyyy…grita el enano.
Mamá risueña, ya imagina la cara del enano mientras lo sorprende, empieza a moverse agachada mientras el nene de tres años se aleja de la columna donde contaba.
Pero él se da cuenta, y no le dan las patas para levantarse, y echarse una picada. Pero lo hace, en ese minúsculo metro y medio que la separaban del objetivo ¨pica¨. Tropieza, de torpe y dura que es, y se estrola contra la columna, dejando un hombro machucado, y una ¨libreto digno del coyote aplastado por el correcaminos¨.
Mamá fisurada, no se podía mover, se le caían las lágrimas del dolor que tenía, mientras se reía, al verle la cara a su hijo, que en sus ojitos reflejaba ¨pobre mina¨…
Por eso cuando alguien comenta, ¨estoy vieja¨, mis empatías más sinceras y que las pendejas no se rían, que es cuestión de tiempo, y veremos…
La propuesta: anécdotas que delatan la corrosión del tiempo en nuestro cuerpo, en los movimientos, en fin, en la vida!
